SOMBRAS AÑEJAS...

otra página en blanco más... tiempo... silencio para pensar y vivir, para utilizar el papel con otra intención que no sea coserlo de letras y desechos de tinta...
nada que ofrecer para calmar la sed, ni placebo que administrarte... el sol del tiempo hilará sus rayos sobre tu piel...
un Hada te lo advirtió... volverán a desmadejarte como un trompo... nunca más... no son sombras, es el negro su color aunque lo disfrace de rayas cuando le viste la tristeza y se siente sol@...
pero no sirve de nada la autocompasión, la maldices igual que la ajena... también los artistas que se automutilan...
quieres que tu espíritu siga creciendo, iluminando... por eso calla, no hables más... demasiados escenarios, demasiados púlpitos, foros llenos de taxidermistas, mistificadores... sensiblería...
eres dueño de tus adentros... pero no olvides el chaleco antibalas, porque la rueda, como la Tierra, es redonda...
no hay luz ni cura en la red... es una droga poderosa para los enfermos de soledad que van buscando, de ventana en ventana, lo que la vida les negó... panteón de la libertad... refugio de onanistas...
pero no te sirve, estimado amigo, no es opio ni prozac para las noches...
llaman a la puerta... ni una palabra más, ciao... adiós...

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